Agua que Gobierno pretende utilizar para embalse en Guanacaste estaría contaminada

Un embalse con agua contaminada generaría más gastos
en limpieza y potabilización del agua para consumo.

Un estudio elaborado por la División de fiscalización operativa y evaluativa del Área de Servicios Ambientales y de Energía de la Contraloría General de la República reveló que más de la mitad de las cuencas de nuestro país están contaminadas.

De un total de 34 cuencas existentes en Costa Rica, 25 de ellas cuentan con índices altos dentro de los límites para establecer la medición de la calidad de este recursos hídrico. Materia orgánica, nutrientes y sólidos, microorganismos peligrosos, metales pesados, plaguicidas e hidrocarburos y contenidos contaminantes emergentes tales como productos farmacéuticos o de cuidado personal, son los que se tomaron en cuenta para establecer los parámetros de medición.

Para la Contraloría existe una alta presión sobre el recursos hídrico ante la contaminación por fuentes puntuales y difusas lo que afecta directamente la calidad de agua suministrada para el consumo humano, situación que viene a presionar a las autoridades debido a la época de fuerte sequía que vive la provincia de Guanacaste actualmente, para lo que el Gobierno tiene como plan construir un embalse para abastecer de agua alas poblaciones guanacastecas.

Para el representante de la empresa China Tecc en Costa Rica, Hugo Berrocal, “el embalse para Guanacaste se alimentaría de agua muy contaminada, como se lee en el informe” y agregó que “costaría $400 millones que hay que pedir prestado, y el agua no sería tratada o en el mejor de los casos habría que agregar el costo de limpiar el agua” para que pueda ser consumida por humanos.

De la misma forma, este informe establece que existe una débil implementación de los mecanismos que garantizan la conservación y la recuperación del agua, y que “no todos los usuarios consumen agua que cumpla con los parámetros de calidad establecidos”.

De la misma forma, este informe establece que existe una débil implementación de los mecanismos que garantizan la conservación y la recuperación del agua, y que “no todos los usuarios consumen agua que cumpla con los parámetros de calidad establecidos”.

Sequía afecta la mayor parte de la provincia de Guanacaste.

Este estudio de calidad de aguas DFOE-AE-IF-01-2013 publicó que el 8% de la población del país recibe agua no potable para consumo humano suministrada por diferentes operadores, de igual forma, otro 8% de los costarricenses se abastecen de agua con calidad desconocida, cifras que presionan a las autoridades para ejercer acciones correctivas y poder manejar la seguía sufrida por los vecinos de Guanacaste.

“Existe tecnología mucho más barata y eficiente que la propuesta por el Gobierno y respaldado por la oposición (…) Todo el manto acuífero está contaminado y lo anterior llega a los mares, está contaminado por heces de los animales y humanos, en el campo casi nadie tiene tanques sépticos y los que lo tienen no le dan mantenimiento, en la mayoría de los casos, esto implica que se rebasen y caigan a la tierra y luego a los mantos acuíferos” manifestó Berrocal.

Y así se confirmó en el informe donde se explica que la situación de los ecosistemas acuáticos dentro de las Áreas Silvestres Protegidas expuestos a vertimientos de aguas residuales, acción que genera presión en las cuencas y las posibles aguas para consumo humano.

“El Estado ha logrado regular los principales ámbitos asociados a la calidad del agua; sin embargo, ha mostrado ser ineficaz en la implementación a cabalidad de dichas normas. Es notoria la falta de políticas país y metas concretas, que se enlacen mediante el enfoque basado en resultados” establece como una de sus conclusiones este informe.

Días anteriores Berrocal denunció ante este medio la falta de interés por parte de las autoridades para llevar agua a Guanacaste, ya que la empresa a la cual representa, China Tecc, ofreció realizar plantas desalinizadoras, proyecto que para Berrocal podría ser financiado por la donación que realizó el Gobierno de China a nuestro país, sin necesidad de endeudarse aún más para ofrecer soluciones a esta provincia.